Además, al futbolista neerlandés también se debió la goleada endosada a los madrileños en el «Estadio de Chamartín» por 0-5. Al año siguiente, y para evitar otro resultado semejante, quedó para la historia el marcaje de José Antonio Camacho al jugador neerlandés dando con la victoria del equipo madrileño. En el verano de 1996, formó parte de un seleccionado argentino sub-18 dirigido por José Pékerman que disputó en Uruguay la «Copa Punta del Este» y se proclamó campeón desempeñándose como volante central.